SALTILLO COAHUILA, MÉXICO.
La felicidad depende del sentido que le demos a la vida, y esta frase me lleva a reflexionar, desde donde percibo la felicidad. Marian Rojas Estapé, una psiquiatra española muy reconocida a nivel internacional, nos explica en varias conferencias y más recientemente en su libro “Como hacer que te pasen cosas buenas”, sobre la explicación de cómo influyen nuestros procesos internos, sobre la percepción de lo que nos pasa, que ocurre en nuestro cuerpo.
Y ella nos explica de manera clara, que el sistema nervioso esta formado por el conjunto de neuronas que se dedican a regular las funciones involuntarias de nuestro cuerpo; y este sistema se divide en dos partes, el sistema nervioso simpático que se relaciona con la acción, y el sistema nervioso parasimpático, que se relaciona con el reposo.
Hablemos pues del sistema nervioso donde esta la acción, este sistema se relaciona con el instinto de supervivencia, como se activa ante momentos de alerta. Imaginemos que vamos distraídos caminando por la calle, cruzamos, y de repente sale de la nada un auto que no frena su velocidad!!! Inmediatamente sentimos en nuestro cuerpo sensaciones. Estas sensaciones son los mecanismos activados por este sistema que nos mantiene alerta en situaciones en las que sentimos una amenaza o incertidumbre; resulta que en la glándula suprarrenal descarga adrenalina y cortisol, dos hormonas que estimulan la reacción de lucha o de huida ante la amenaza.
Vamos a hablar en esta ocasión del cortisol, en esta breve explicación, pudimos darnos cuenta del mecanismo para activar esta hormona, y a simple vista, observamos que es bueno, es una hormona que nos permite estar alertas. La sensación que sentimos, la punzada en el pecho, es el cortisol haciendo su función.
El cortisol afecta múltiples sistemas del organismo, nuestros sentidos se activan, la musculatura se prepara para la evasión del peligro, la sangre viaja a los músculos para potencializar su acción, se nos va el apetito, el corazón se acelera; todo esto funciona para preparar al cuerpo a responder ante la amenaza.
La cosa se complica porque muchos de nosotros, sino es que la mayoría de las personas en el planeta, en este momento de la existencia, vivimos en un estado constante de alerta; provocando otras funciones nocivas como lo son; la Inhibición de la secreción de insulina (que a la larga puede provocar diabetes), la afectación al sistema endocrino y sobre todo la afectación al sistema inmune.
¿Porqué afecta al sistema inmunológico el estar alerta? Es de todos sabido que cuando te enfermas te sientes cansado, con sueño; esto es porque las defensas requieren de energía para poder actuar, de hecho todo requiere energía, y cuando estas en alerta con el cortisol al tope, esta energía se guarda, esa es la razón por la cual se inhiben o se atrofian, la falta de energía.
Entonces cuando nos encontramos intoxicados de cortisol, tenemos energía canalizada en otros asuntos, que nada tienen que ver con el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Y ¿Cuál es la razón por la que nos intoxicamos de cortisol? Vivir en un estado constante de alerta, no dejar que el cortisol tenga su ciclo normal. Vivir en el estrés y en la preocupación constante. Esa preocupación la vivimos por experiencias reales y por experiencias creadas. ¿Cómo es eso? El 91% de las cosas que nos preocupan no suceden, por lo tanto estoy induciendo a mi organismo a vivir en estados de alerta, intoxicado en cortisol.
Pero ¿Qué puedo hacer? Marian nos invita a recuperar el control de nuestro cuerpo y de nuestra mente, bajo la premisa de que somos lo que pensamos, podemos darnos cuenta de como funcionamos y cuales son los procesos mentales que se activan ante nuestros pensamientos; y reconociendo que vivo en el estrés, en el pensamiento catastrófico, que estoy irritable porque no duermo, porque estoy inflamado, porque se que estoy intoxicado de cortisol, es el primer paso.
Hacer ejercicio nos ayuda no solo a mantener nuestros músculos y nuestra salud física, sino que evapora los efectos del cortisol, eleva la segregación de otras hormonas como la oxitocina o la serotonina (de las cuales les platicare en otra ocasión), que nos ayudan de manera eficaz a bajar los niveles de cortisol.
Otro punto que nos comparte Marian, y que me pareció importante relevar es como podemos ir educando a nuestra voz interior, que para escucharla, requerimos de hacer un ejercicio de autoconocimiento y atención a lo que nos dice nuestro corazón, nuestra intuición. Echarnos un clavado hacia nuestro interno y darnos cuenta de como nos tratamos a nosotros mismos, como tratamos a los que viven a nuestro alrededor, que tanta conexión tenemos con la luz que existe y que habita ahí.
Desde donde podemos contener ese estrés, esa preocupación, desde el ocuparnos de fomentar nuestra confianza, de saber en este caso, que nuestro cuerpo es sabio e inteligente, que en nosotros, en nuestra actitud, esta la respuesta a percibir el mundo, como yo lo quiero, como yo lo necesito, yo tomo la decisión de que actitud tengo ante la vida y ante las cosas que me suceden; y desde ahí, puedo darle el sentido a mi vida y ser feliz.
OFELIA LOPEZ SALGADO
30 JUNIO 2022
· “COMO HACER QUE TE PASEN COSAS BUENAS” Marian Rojas Estapé, España, 21ª. reimpresión para México, Marzo del 2022.