11 de junio de 2019

¡La ley que es!


Hace poco tiempo escuche a alguien lanzar una pregunta en una conferencia, dicha interrogante fue ¿cómo es posible que Yahveh NO siendo el Dios verdadero sobre el que enseño Jesús, dio unos mandamientos o leyes que parecían ser buenas? Esta pregunta me hizo reflexionar y querer profundizar más en este asunto. 

Pues es un cuestionamiento recurrente y con bastante sentido. 

Esos diez mandamientos y 613 leyes dadas por Yahveh a Moisés, en el monte Sinaí, mandamientos que luego este plasmo en dos piedras o tablas de la ley. Lo cierto es que aparentemente son mandatos coherentes y que podríamos considerar buenos. 

Pero cuando profundizamos y vamos en busca de respuestas a nuestro propio corazón, descubrimos que realmente es una ley que nació MUERTA y está dirigida a hombres MUERTOS. 

Y digo esto porque si hacemos el ejercicio y tomamos uno de esos mandamientos, el quinto, por ejemplo, que dice. “NO MATARAS” esto nos tiene que hacer pensar que si Dios, el creador de todo tiene que escribir en piedra lo que en una creación perfecta debería contener el ser humano por naturaleza, es que algo le salió mal a ese “dios”. 

Y esta reflexión me lleva a una primera respuesta, y es que ese pueblo elegido, el pueblo judío, no puede tener pertenecía ni parte alguna con el verdadero padre eterno. Pues no pueden reconocer el valor de la vida como un principio original. Y por tanto a su falso “dios “le hizo falta darles la ley escrita para que no se exterminaran entre ellos. Y digo entre ellos porque constantemente estaban matando y cometiendo masacres por orden y en nombre de su falso “dios” asesinando hombres, mujeres y niños, aun a los de pecho, como lo refiere 

El libro de 1ªde Samuel 15:3. En una de las tantas matanzas cometidas por esta raza. 


“Hombres “pertenecientes a una genética oscura, el código (MERCAIN) genética que los induce al egoísmo, a la violencia y la agresión como conducta natural y que así a quedado demostrado a lo largo de la historia. Una raza de “hombres” que son capaces de las peores atrocidades. (sacrificios, incluso humanos, masacres, genocidios, prácticas sexuales antinaturales y demás atrocidades) y donde como guinda del pastel esta misma raza “elegida” de Yahveh, asesina a Jesús el Cristo, quedando más que demostrado como el mismo los denunció. “no sois de mis ovejas”. Por tanto, con esta sentencia lapidaria están cortados de la creación, ahogados quedan ellos y sus hijos en la sangre de Cristo sangre que pidieron cayera sobre ellos y sobre sus hijos. 


Pero después de contadas estas cosas 

¿dónde se encuentra entonces escrita la ley del padre eterno o gran innominado? 

Hagamos uso de lo escrito por 

Pablo de Tarso en la 2ª carta a los corintios 3:3~siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón. 



Porque la ley del Dios VIVO es ley VIVA para hombres VIVOS, para hombres que hoy reconocen el poderío y sabiduría que contienen en su propio corazón, esa sabiduría y maestría interna que les permite diferenciar lo que es luz de lo que es tinieblas, y que toman esas tablas de piedra y las rompen contra los altares y púlpitos de los falsos espiritualistas de este siglo, 

porque entienden que no son más que sinónimo de esclavitud y de ignorancia. 

Y porque este hombre universal sabe y reconocen en su corazón que quitar la vida a alguien es un acto atroz y deleznable, que solo alguien lleno de oscuridad y tinieblas por dentro podría cometer. 

¿Cómo quitar la vida a un semejante en quien me veo reflejado, a quien está hecho de mi misma esencia y por tanto es mi hermano, que contenemos y fuimos creados bajo los mismos principios venidos desde la preexistencia.? 

El hombre universal es la ley y ve la ley viva escrita en todo cuanto le rodea porque todo cuanto le rodea es una manifestación de la ley. 

En la hierba, en el árbol, en el animal, en la montaña, en el rio, todo cuanto es, está hecho del verbo que es ley. 

En conclusión, lo que necesitamos es escuchar y buscar las respuestas en nuestro propio corazón, esas respuestas que vienen del alma que todo lo sabe, pues es ese regalo, esa guía, esa llama preexistente que ese falso “dios” intento apagar. Pero que fue determinado por el padre eterno de todas las luces que llegaría el tiempo en que el ser humano original reavivaría esa llama. 

Comenzando por el hombre de la reina del sur (Latinoamérica) el hombre del cóndor (CONOCIMIENTO DORADO) en cuya genética y por estupidez de las tinieblas se mezclaron las 4 razas matrices dándole un gusto al Dios viviente como bien lo expresa Ricardo Arjona en su canción carabelas. 

Este es el hombre que esta llamado en este tiempo final a recurrir nuevamente a ese faro (alma) a la hora de tomar decisiones y poder así corregir primero su camino y luego el camino de la humanidad. 

Volvamos a vivir bajo los preceptos de la ley VIVA, la ley del espíritu, la ley del corazón. ¡Y podemos estar seguros que pronto tendremos un mundo mejor para una humanidad mejor! 

Ronny Rivera.

2 comentarios:

  1. Excelente Ronald, el reconocer la ley de vida, nos permitirá elevera nuestros impulsos de pensamientos para trabajar en nuestro interior y con el el desarrollo de nuestro espiritu. Saludos.

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