La falta de recursos energéticos ha llevado a los indios a agudizar el ingenio, hasta el punto de desarrollar máquinas que convierten la basura en petróleo o cocinas de leña ecológicas.
En su fábrica a las afueras de Bombay, en India, Nitin Bondal observa con orgullo una gran máquina.
La estructura de 4 metros erguida en un recodo del polvoriento taller tiene un aspecto futurista.
Dos hombres trepan hasta la parte superior de la máquina y vacían dentro bolsas llenas de pedazos de plástico roto.
Cuando
Bondal aprieta el botón, el aparato cobra vida y, en cuestión de una
hora, gotas de petróleo empiezan a caer en una botella colocada en el
otro extremo.
"Esta es nuestra máquina prototipo, convierte todo tipo de basura en petróleo crudo", dice orgulloso.
"Ponemos todo tipo de cosas ahí, desde plásticos a deshechos electrónicos y neumáticos viejos".
Bondal
asegura que esta tecnología tendrá la capacidad de convertir 150
toneladas de desperdicios en 150.000 litros de petróleo crudo cada día
una vez esté enteramente operativa.
"Funciona
con lo que llamamos sistema policrack", explica. "Cocinamos el material
hasta convertirlo en gas. Cuando calientas un material se libera
carbono e hidrógeno", dice.
Tal
como señala Bondal, el gas pasa luego a un "catalizador especial", que
descompone las moléculas para formar gas hidrocarburo y gas petróleo,
que cuando se enfría se convierte en petróleo líquido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario